RUTA POR CASTILLOS DE ALICANTE
Esta ruta es una visita a los castillos y fortalezas de la comarca de Vinalopó, en la provincia de Alicante. Son el testimonio de las
viejas batallas que tuvieron lugar en esta zona. Edificios cuya historia se remonta a los tiempos del Cid Campeador, el famoso
caballero medieval, y a las luchas fronterizas entre musulmanes y cristianos durante la Reconquista.
Proponemos iniciar el viaje en el centro del valle del Vinalopó, concretamente, en las ciudades de Elda y Petrer. Están muy cerca
la una de la otra y, además, son la meca de la industria del calzado alicantina.
Empezamos en el Castillo de Elda: erigido en 1172, fue propiedad de los almohades hasta su conquista cristiana a mediados del
siglo XIII. De la misma época data el Castillo de Petrer, en el que destacan sus murallas almenadas y la gran torre del homenaje,
que suele servir de sede para distintas exposiciones.
A continuación, nos dirigimos a la población de Sax, a apenas 12 kilómetros de distancia. Su castillo, situado en lo alto de una
peña escarpada, domina estratégicamente el valle. El perfil que nos ofrece es el de dos grandes torres unidas por murallas
almenadas.
La siguiente parada está a 7 kilómetros, es la localidad de Salinas. Se encuentra junto a la laguna del mismo nombre, de la que
antiguamente se extraía sal, y que hoy es un paraje natural donde anidan numerosas aves. Tomamos luego dirección a Monóvar, a
11 kilómetros, la villa natal del escritor José Martínez Ruiz, Azorín, perteneciente a la llamada Generación del 98. La ermita
barroca de Santa Bárbara es uno de los edificios más destacados de Monóvar.
A unos cuatro kilómetros, en Novelda, veremos el Castillo de La Mola, con su peculiar torre triangular, junto al Santuario de la
Magdalena. La ruta prosigue su rumbo hacia el Castillo del Río, a 8 kilómetros, donde estuvo el primitivo asentamiento (siglo
XII) de la villa de Aspe, actualmente en semirruina. Después, a otros 4 kilómetros, aparece entre viñedos la localidad de
Monforte del Cid.
A poco más de 10 kilómetros, pasaremos por el pueblo de Agost, conocido por su cerámica. Entonces ya nos habremos adentrado
en la sierra del Maigmó. Por el camino encontraremos el término municipal de Tibi, donde nos espera un embalse del siglo XVI,
que está considerado como el más antiguo de Europa todavía en uso.
Desde Tibi continuamos hasta Ibi, a 12 kilómetros, famosa por su industria del juguete. Tras recorrer 10 kilómetros, llegaremos a
un cruce que lleva a las cercanas localidades de Castalla y Onil. En la primera nos recibe su imponente castillo árabe del siglo XI,
asentado en lo alto de una escarpada montaña. Una formidable construcción compuesta de murallas, torre del homenaje y palacio
gótico. Ya en la población de Onil hay que ver el conjunto formado por el Castillo-palacio del Marqués de Dos Aguas (gótico,
siglo XVI) y la iglesia parroquial (siglo XVIII).
A sólo 10 kilómetros tenemos otro sitio que no hay que perderse: Biar. Posee uno de los mejores castillos de la comarca, con
doble recinto amurallado y torre del homenaje. Está situado, además, en una zona de gran interés natural.
Más adelante, a 9 kilómetros, llegamos al punto y final de la ruta, la ciudad de Villena. Se extiende a los pies de la colina donde
se levanta su Castillo de la Atalaya. Cuenta también con otros edificios de interés como, por ejemplo, la iglesia gótica de
Santiago, el santuario de Nuestra Señora de las Virtudes y el Palacio Municipal, del siglo XVI. Este último es sede, además, del
Museo Arqueológico Municipal, donde pueden admirarse las piezas de orfebrería que componen el famoso tesoro ibérico de
Villena.
TEXTO SACADO DE ESPAÑAESCULTURA.ES